Lizard Island es el resort isleño más septentrional de Australia y su proximidad a la
Gran Barrera de Coral lo convierte en un tipo de alojamiento recóndito al que solo
se puede acceder desde Cairns mediante vuelo panorámico de una hora sobre el
conocido arrecife.
Dado que solo hay un resort en la isla, con cuarenta habitaciones y suites, la
tranquilidad y la belleza natu-ral de la isla serán las que te den la bienvenida.
Dispone de veinticuatro playas privadas de sedosa arena blanca, por lo que podrás
gozar en soledad de las mismas o buscar la compañía de otros según pre-fieras.
Sus cristalinas aguas son un paraíso para los amantes del esnórquel y en ellas
encontrarán viveros de alme-jas, corales y una floreciente vida marina. Es posible
sumergirse y recorrer el interior y exterior del arrecife, así como algunos de los
puntos más conocidos en el mundo del buceo, como es el famoso Cod Hole.
La filosofía culinaria es sencilla y en ella priman los productos frescos de
procedencia local. El Saltwater Restaurant cambia de menú todos los días, aunque
los huéspedes también pueden saciar su apetito con un pícnic gurmé en una de las
íntimas pla-yas o con una cena de degustación para dos al atarde-cer.
Pero sus atractivos no terminan aquí… Tiene un lujoso y completo spa denominado
Essentia Day, puntos de pesca de primera categoría, botes individuales para
explorar la zona a tu propio ritmo y un abanico de ac-tividades diferentes, como
visitas guiadas a la esta-ción de investigación, excursiones de buceo o cruceros con
cata de vino y quesos durante el ocaso.
Todas las habitaciones y suites de Lizard Island gozan de vistas panorámicas al
océano azul y se han diseña-do con elegancia y sencillez para realzar y plasmar en
su interior la belleza natural que las envuelve.
No hay lugar comparable a Lizard Island.